El profesor. Reflexión de autoridad, disciplina y comportamiento en imágenes.

¿En qué momento de la historia se dejaron de poner ladrillos para sustentar lo que se ha ido haciendo día a día?. Toda persona necesita en la infacia, que su circulo más cercano le ayude a construir una base fuerte y resistente. El problema viene cuando bebés que nacen sin culpa de nada son abandonados en la selva social. ‘El profesor’ expone al espectador una crítica sobre el verdadero y único problema en el mundo, la incomprexión.

El film trata de manera violenta este tema y no duda en mostrar el tormento que puede llegar a sufrir una persona que está a cargo de enseñar a los jóvenes el buén camino. La historia se narra desde el punto de vista de Henry (Adrien Brody) un profesor que ha vivido toda su vida precisamente de la misma manera que casi todos sus alumnos. La falta del ambiente familiar, la búsqueda de la identidad en la nada o la necesidad de encontrar a álguien que te escuche, es el hilo narrativo que sostiene en todo momento la historia. Atrás queda la vocación de enseñar, que más bien parece un holocausto para unos profesores llenos de extrés y frustración.

Las ganas de encarrilar por el buen camino que tiene Henry se ven cumplidas con la llegada en su vida de una joven solitaria y perdida, Erica (Sami Gayle). A Henry le recuerda en todo momento lo malo vivido y aunque sin mucho entusiasmo, no duda en ayudarla. La película no culpa a nadie de esta situación diréctamente, pero si deja intuir cuales son lo fallos que se cometen y que todo el mundo ve sin intención de solución alguna.

Parece que este tema se ha puesto de moda en los últimos años, pues hay otros films como ‘El profesor Lazhar’ de Philippe Falardeau o ‘La clase’ de Laurent Cantet que también tratan de forma distinta el mismo tema. O también podríamos poner otra película hablando de lo mismo, con la misma radicalidad, pero desde el otro punto de vista, desde la piel del adolescente.

Esa película no es nada más y nada menos que la genial ‘Precious’. Respecto a la parte técnica, la direción corre a cargo de Tony Kaye, quién dirigó también ‘American History X’. Kaye se suma a la moda y rueda esta historia al estilo del falso documental pero a la vez mezclandolo con la forma más clásica. Algo que queda estraño, pues el constante coqueteo con el foco y el zoom no me funciona con la pasividad y quietud. Pero para gustos los colores.

El montaje es fiel a la velocidad de la narrativa y se complementan el uno al otro a la perfección. Teniendo un montaje en paralelo de la historia y las reflexiones del protagonista, que no deja caer nuestro interes.

En conclusión, ‘El profesor’ es una película que cuenta la situación actual de la educación. Aunque se base en el sistema educacional estadounidense, los rasgos más importantes del film son los mímos para todo el mundo. Aquí en España podemos encontrar esta película en la mayoría de las aulas. Ahora más que nunca la educación es objeto de negocio para los políticos. Los padre pierden sus trabajos y se alejan más de sus hijos. Los profesores tienen cada vez menos autoridad disciplinaria. Y los protagonistas de todo, los niños, viven ajenos a todo.