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Dans La Maison. Ni siquiera la lluvia baila descalza.

Hoy día 9 de Noviembre de la mano de Golem Distribución se estrena en nuestras salas la ganadora a la Concha de Oro a la mejor película y premio del jurado al mejor guión en el 60 Festival de San Sebastián, ‘Dans la maison’. Dirigida por François Ozon, basada en la obra ‘El chico de la última fila’ del dramaturgo contemporáneo español Juan Mayorga.

Dans la Maison.

Claude (Ernst Umhauer) un joven con una familia un poco desestructurada y con una vida humilde, cada tarde de verano se detiene en un parque frente a una casa para ver a sus habitantes, el hijo, Rapha, es un compañero del instituto. Su forma de vida le llama la atención y por ello cuando en clase ya comenzado el curso le piden hacer unas redacciones el da rienda suelta a su imaginación contando sus vivencias y sueños dentro de esa casa mientras que intenta enseñar matemáticas a su compañero. Esta situación creará un lazo de nexo literario entre profesor Germain (Fabrice Luchini) y alumno que hará que las cosas vayan surgiendo no se sabe muy bien si con naturalidad o puro ingenio.

La película es todo un juego de imaginación intimista con saltos de la realidad a la ficción de los personajes para que cada uno de ellos pueda sobrevivir en su propia vida o en las incursiones que hace en la de los demás, cada uno crece con el otro y se alimentan juntos de la propia vida. Sobre todo se enriquecen con el arte y con las letras en concreto porque está totalmente expuesto así, a soñar con la escritura, sobre todo los actores principales, pero también con la pintura, que se acaba comparando con cada historia creada.

El director magistralmente ha hecho un homenaje al arte en sí, pero digamos que eso ha sido posible a que de la obra que parte “El chico de la última fila” lo contempla así. Aunque como todas las películas que se basan en libros, hay cosas que cambian, aquí la esencia se ha respetado, se han cambiado personajes, pero no el fondo. Ozón ha tratado el texto con un matiz muy deferente.

Lo mejor de todo es el tono poético e irónico de narración del guión y narrativa, que dan una rienda suelta a la improvisación absoluta del espectador a poder especular en qué momento se encuentra en la objetividad o flotando en un mundo paralelo, como si de un sueño se tratase cada uno busca lo que interprete, lo que quiere. Y desde luego acertadísimo contar la historia con una voz en off cautivadora, que te engancha desde los primeros minutos a una narración contada en tono personal a cada espectador como si uno estuviera solo, y se evadiese de lo que tiene alrededor, lo que he dicho antes te deja inmerso en un sueño.

Aunque pueda parecer enrevesado o que no explique nada para mí una frase que utiliza en unos versos Claude «ni siquiera la lluvia baila descalza» es una metáfora en todo regla. Me explica mucho de la película, me cuenta las lágrimas y carencias de muchos personajes, me cuenta nexos, que nadie está exento de cualquier suceso y que nada ni va ni viene sólo, pero eso sí está claro cada uno interpretará una cosa distinta, seguro. O incluso puede que otra persona no dé importancia a esa frase.

Y como todo queda abierto para que el espectador piense, yo me pregunto realmente ¿qué casa quiere visitar Claude? ¿Su primera incursión en una casa es la búsqueda de otra o de su sola felicidad? porque todo evidencia que le falta algo. Es una búsqueda de mirada interior que no sabe muy bien por donde va a salir, y por medio de la literatura tiene una vía de escape en una vida en principio un tanto vacía e inerte. Su personaje necesita recibir pero también dar porque con eso percibe recompensa, es como si necesitara de la aprobación de los demás por su propia inseguridad, pero al final el da seguridad a otros.

Aunque el tono en el que trata las situaciones sea irónico no son para nada irrespetuosas. Roza por momentos ligeramente la comicidad pero sólo cuando se juntan el sarcasmo de la propia vida con unas actuaciones excelentemente sencillas y cómicas. Ese conjunto da lugar a un humor simple que al final es el que podemos vivir cada uno día a día y no es ofensivo.

Françcois Ozon se caracteriza por ahondar en todas sus películas en los sentimientos sobre todo por todo aquello que una perdida lleva consigo. Aunque en su filmografía tiene comedias, no se caracteriza por ello, la mayoría de sus películas son dramas, en esta que nos trata ha querido mezclar ambos géneros. Su anterior película fue “Potiche, mujeres al poder” una comedia.

Para esta película se ha rodeado de actores veteranos como lo son Fabrice Luchini, con el que ya contó en Potiche y que ha participado en películas tan recientes como ‘Las chicas de la sexta planta’ y con una larga trayectoria cinematográfica de más de 40 años. En el papel femenino tenemos a Kristin Scott Thomas, que hace poco ha estado en pantalla con ‘La pesca del salmón en Yemen’ y sobre todo conocida por su papeles en ‘El paciente Inglés’ y ‘El hombre que susurraba a los caballos’. Qué decir de sus interpretaciones que son impecables y que seguro que a su lado el novel Ernst Umhauer ha salido ganando, porque le ha sido fácil actuar, como el mismo ha dicho.

Acerca de Susana Peral

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3 comentarios

  1. Gracias Towanda, si vas a verla estaremos encantados de que compartas tu opinión con nosotros.

  2. Con tan grata explicación se anima una a ir a verla. Felicito a la persona que ha hecho la crónica.
    Saludos.

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