Crítica de cine. ‘Los Amantes Pasajeros’.
Pedro Almodóvar regresa a la gran pantalla con una de las tragi-comedias más divertidas y alocadas que he visto en los últimos meses. En ‘Los Amantes Pasajeros’, vuelve a sus orígenes, a la época en que hacía ‘Mujeres al Borde de un ataque de nervios’, o ‘Entre Tinieblas’.
De nuevo soy incapaz de coincidir con los pseudocríticos que solo insultan y desprecian, porque creo que es una cinta que lo único que pretende es hacernos pasar un buen rato, lo cual es de agradecer, además de que sirve para desengrasar un poco de la maquinaria hollywoodiense que últimamente solo hace revisiones de cuentos fantásticos, lo cual no quiere decir que sean malas, sino que uno puede acabar un poco saturadillo de ver siempre lo mismo. Claramente lo nuevo de Pedro es un chorro de aire fresco en una cartelera cada vez más saturada.
En esta ocasión, los espectadores nos metemos en un vuelo con destino a México, en la clase Business, acompañados por tres azafatos realmente geniales. Joserra Berasategui (el estupendo Javier Cámara), Ulloa (Raúl Arévalo) y Fajas (Carlos Areces). Al final de la película soy incapaz de decir cual de los tres hace la mejor interpretación, porque lo cierto es que están estupendos.
Y, en cuanto a los pasajeros que van en este particular vuelo, tenemos a una chica Almodóvar de siempre, la magnífica Cecilia Roth que de nuevo hace un papel excelente, metida en la piel de una diva del Bondage llamada Norma. Todos los pasajeros tienen una historia detrás de ellos, historias que no desvelaré para que los lectores las descubran por sí mismos.
Como eje central de ‘Los Amantes Pasajeros’, tenemos el fallo mecánico que se produce en el avión y que les impide viajar a México, por lo que, durante todo el metraje, están dando vueltas por el cielo de Toledo, pero no el Toledo de Ohio, sino el de Castilla La Mancha. Y la mejor idea que se les ocurre a los tres azafatos para alegrarles la travesía a los pasajeros es la de mezclar un poco agua de valencia con unas mescalinas. El resultado…hay que ir a verla para comprobarlo.
Para todos aquellos que se rieron con esas comedias alocadas de Pedro, para todos los que estén un poco cansados de ver siempre el mismo tipo de películas y en definitiva para todos los que quieran pasar una tarde de diversión con algún toquecito trágico, porque una comedia total no es ni mucho menos, pero no deja de ser una de las propuestas más interesantes que se pueden encontrar en la cartelera.
Crítica de cine de Ramiro González.
Yo no tengo ningún prejuicio ni político ni social y la película me pareció pésima e insultante a la inteligencia del espectador. Busca un humor surrealista…, bueno, de acuerdo, pero el surrealismo no es la falta de originalidad temática que, desde mi punto de vista, busca hacer reír con el humor de los años 80 de forma muy casposa, anticuada y repetitiva. Es una película que hará reír a los que se sonrojan cuando oyen un pedo por la tele…, y como si se hubiera hecho para ellos una película de pedos. Me parece insultanfe para el espectador por lo visto y anticuado del tema. Actores de 10, película de 0.
Emprendedores tiene razon y es cierto que hay que meditar mucho la pelicula que se va a ver por el tema del precio de la entrada, pero el problema especifico de esta película, son los prejuicios que la gente en general va a tener y tiene por ser de quien es. Y lo más sano desde mi punto de vista es ir con la mente abierta.
Yo me he reído. Pero hoy en día, con lo que cuesta el cine hay que pensarse mucho que películas merecen la pena y cuales no. No está mal, pero esperaba un poco más.
Hombre, no es un peliculón, pero tiene sus puntazos. Ademas Carlos Areces me encanta me parto de risa solo con su forma de hablar.
No te preocupes no es ningún crimen, aunque hay mucha gente que pasa de ella por prejuicios políticos. Creo que hay que saber separar las cosas para ser objetivo.
menos mal, no soy el único que se ha divertido con ella. Y es que parece que es un crimen decir en público que te ha gustado