Crítica de El extraordinario viaje de T. S. Spivet. Un cuadro de Chagal lleno de imaginación

Cuando Jean-Pierre Jeunet estrena trabajo es inevitable que se cree una gran expectación, en nuestro recuerdo está Amelie.

El extraordinario viaje de T. S. Spivet llega a las salas de cine el próximo 4 de julio.

Ameliie es una película referente del cine francés, algo novedoso que ha pasado a la historia como un clásico si se me permite la licencia.

Es inevitable comparar y poner listones, en este trabajo creo que Jeunet se ha querido alejar de todo y reinventarse para evitar que se le compare o se le encasille. Se ha ido a otro país, ha rodado en ingles, con actores en su mayoría anglosajones y ha hecho una película familiar, cómica con atrezos dramáticos, todo ello con su sello inconfundible.

El extraordinario viaje de T. S. Spivet, Es una aventura de un niño T. S. Spivet que vive en el seno de una familia muy peculiar en un rancho de Montana, su madre que da vida la actriz británica Helena Bonham Carter le gusta investigar insectos, su padre Callum Keith Rennie es un ranchero que está centrado en su trabajo en el rancho, su hermana que solo piensa en los concursos de belleza y su hermano que está todo el día jugando a los vaqueros.

Spivet encarnado por Kyle Catlett tiene diez años y posee una inteligencia privilegiada, por su trabajo científico le han dado un premio muy prestigioso, como nadie le toma en serio decide aventurarse a cruzar los Estados Unidos de costa a costa para recogerlo.

El extraordinario viaje de T. S. Spivet es una historia de una gran ternura, cuidada al milímetro, repleta de matices, con personajes de personalidades muy diferenciadas que el realizador francés ha sabido conjugar muy bien en un guión sin demasiados sobresaltos, basado en la novela del escritor americano Reif Larsen.

Destaca su fotografía, de una gran belleza, rica en luminosidad y color, con imágenes de paisajes majestuosos que se impregnan en la retina del espectador. La película es como estar viendo una exposición de Chagal o estar metido en un libro de pop up.

El extraordinario viaje de T. S. Spivet es un viaje apasionante por los Estados Unidos de la mano de una mente prodigiosa y aventurera en un cuerpo de niño llena de detalles humanos para encandilar a los más pequeños que rápido se verán identificados con las acciones de T. S Spivet y su simpática familia.

La inteligencia y la ingenuidad van de la mano en esta producción talentosa. Es un trabajo lleno de madurez, con reflexiones de contenido filosófico nada recargadas y agradables al espectador. Con la esencia del cine francés, llena de frescura, imaginación y alegría. Destaca un aire retro un tanto Pin ap. Los actores hacen un papel aceptable por que no es un filme de gran carga interpretativa, destacando el trabajo del niño que asombra con su candidez e ingenuidad.

Si hay una palabra que define esta cinta es PLACER con mayúsculas.

Una Crítica de Antonio Arenas.