Hoy se estrena en cines esta maravillosa película española ganadora de la Concha de Oro y Concha de plata en el pasado Festival de cine de San Sebastián.
Magical Girl está dirigida por Carlos Vermut, un director al que el mismísimo Pedro Almodóvar definió como una de las revelaciones de lo que llevamos de Siglo. Un realizador que con su anterior trabajo, Diamond Flash, sedujo a la crítica de nuestro país.
En Cineralia hemos tenido ocasión de entrevistarle justo antes del estreno en cines de su película.
- ¿Cómo se llega a este guión tipo puzzle que has montado, sin perderse en ningún momento y sobretodo sin perder al espectador?
Carlos Vermut – Yo siempre empiezo de una idea principal, teniendo claro que todo lo que añado a esa historia es para sumar y no para restar, para sumar complejidad o sumar elementos que hagan que el espectador quiera formar parte de la historia. Empiezo en este caso con una idea de estructura, de chantajes encadenados y luego intenté añadir elementos en la película que tengan algún significado, que no sean gratuitos y caprichosos, que tengan algún sentido, que ayuden a mejorar la película.
- Yo cuando vi la película tuve la sensación de enfrentarme por momentos a un minimalismo escénico, pero brutal además, que lo que hacía era engrandecer el guión, ¿Fue intencionado?
C.V. – Si, te voy a decir que yo invierto mucho tiempo en el guión y me gusta que la estética de la película no entorpezca la necesidad de poder seguir el guión. Es verdad que hay mucho minimalismo en cuanto a las actuaciones, a la puesta en escena, pero es intencionado para que la historia y los personajes puedan desarrollarse.
- ¿Cómo ha sido escarbar en la mente humana desde la inocencia de una niña hasta llegar al maquiavelismo de los adultos?
C.V. – Como he dicho antes la película es una cadena de chantajes, yo lo que no quería es que fuera solo eso, ¿como utilizo esta estructura, este artefacto de cadena de chantajes para darle algo más, para que me sirve esto?. Me servía para hacer una historia en que las víctimas se convierten en verdugo, esa ya le da una dimensión humana. Me gustaba mucho que me sirviese para hablar de esto, desde la niña, que no sabemos si es consciente o no de lo que está haciendo, para que su manera de actuar generase empatía con el espectador.
- En parte has hurgado en las dos caras que puede tener una misma persona, en todos los personajes, la fragilidad y la fortaleza, ¿Son compatibles ambas?
C.V. – Si claro. Cuando estudias un personaje es muy fácil juzgarlo y posicionarte siempre desde una línea que te separa del mismo, a mi me gusta compartir cosas con los personajes e intentar que sean una dimensión mía, una parte mía, que tengas esa dualidad que todos tenemos, monentos egoistas, sádicos, benévolos, malvados, yo quería que los personajes tuvieran esas características a nivel humano y también a nivel narrativo. La película es mucho más interesante si además te ofrece un giro, que te mantenga atento.
- Ahora que dices del egoismo, creo que el guión va desde el amor hasta el egoismo pero resaltas muchísimo la soledad.
Carlos Vermut – Si, puede ser, no soy consciente de la soledad de los personajes. Yo creo que esta se da por la incapacidad de comunicarse unos con los otros, aunque hablan y se explican no son capaces de mostrarse como ellos mismos, enseñar a los otros su verdadero yo.
- Además has mostrado mucho como crisis emocionales, pero a través de metáforas en el guión y creo que eso engancha mucho al espectador.
C.V. – Si por que no lo verbalizas, el problemas del cine es precisamente poder contar algo sin tener que explicarlo, como explicar ciertas cosas sin tener que verbalizarlas, a través de la magia de la imagen, con un símbolo, con una carta en blanco, eso es lo difícil.
«El problemas del cine es precisamente poder contar algo sin tener que explicarlo»
- Has utilizado mucho el plano y contraplano y sobretodo planos fijos, ¿Para marcar algo o para retratar más a los personajes?
C.V. – Si, es para intentar se aséptico en cuanto a la construcción de la película a nivel de realización. Yo busco que la realización exista al servicio de la historia, dejar que el actor lleve parte del peso de la tensión de la película.
- Has dejado muchos enigmas en la película ¿Es para abrir la mente del espectador?
C.V. – No, es para abrir el corazón del espectador, que es distinto. Yo no quiero que el espectador sepa, sino que sienta que ocurre algo misterioso y eso no se hace con la cabeza, se hace con el corazón. Yo delego en la sensibilidad de cada espectador, más que en la mente.
- Con lo cual nos enfrentamos a un guión transcendental, pero emocional y sentimental.
C.V. – Eso es.
- La película tiene mucho de cine Noir y te están comparando con maestros de la talla de Kim Ki–duk, ¿Un honor o todo un reto para tu próximo trabajo?
C.V. – Un honor son directores que admiro y eso siempre es un honor que te comparen con gente que admiras, con directores de esa talla. Es una gran responsabilidad pero motiva para seguir trabajando.
«Cuando oí a Almodóvar decir que soy la gran revelación de lo que llevamos de Siglo casi me desmayo».
- ¿Y las declaraciones de Pedro Almodóvar de que eres la gran revelación de los que va de siglo?
Carlos Vermut – Pues imaginate, cuando lo oí casi me desmayo. Le admiro mucho ya desde pequeño, mi madre me ponía películas de Almodóvar, me ha gustado de siempre, soy un gran admirador y he aprendido mucho de él.
- ¿Que ha sido más complicado escribir el guión o el rodaje en si?
C.V. – Escribir el guión siempre es más complicado para mi. Hay juegan fuerzas y elementos extraños, tanto mentales como intelectuales y emocionales y tienes que combinarlo todo. Es como estar manejando unos platos chinos durante un año, es agotador.
- ¿Cuales son tus referencias cinematográficas?
C.V. – Me gusta mucho todo tipo de cine, me gusta Tarantino, me gusta Bergman, Truffaut, el cine coreano, el cine japonés, me encanta Hiroshi Teshigahara y su película La mujer de las dunas que es una de mis películas preferidas de todos los tiempos, tengo mucha pasión por el cine japonés. Y el cómic, el manga me vuelve loco.
- ¿Como fue la elección de los actores y el trabajo con ellos?
C.V. – Yo Luis quería desde el principio que estuviera en la película, el papel lo escribí para él y luego los personajes de Bárbara y de Damián eran tipos de 40 50 años los dos, eran de la misma edad, luego me propusieron a Bárbara Lennie y bajé a la edad de Bárbara y esto funcionaba con ella pero no con Damián, entonces lo que hice fue convertirle en el profesor y eso funcionó. Dejé mucho que expresaran su talento, no les contaba nada de sus personajes por eso, para que ellos funcionaran con la propia intuición.
- ¿Como ha sido ese paso con triunfo incluido por San Sebastián?
C.V. – Pues muy, muy feliz cuando me dijeron lo de la Concha, cuando me dijeron lo de la otra Concha ya fue una locura y al dia siguiente de vuelta a Madrid estaba con una depresión bastante importante, estaba de bajón, en el coche sin hablar. De pronto miles de mensajes, toda tu gente pendiente, tu teniendo que dar explicaciones, cuando odio dar explicaciones, muy agobiado. No quería ser maleducado con la gente pero quería estar solo y no me dejaban. Y la verdad es que ahora mucho mejor… espero no ganar un Oscar nunca (risas).
«…espero no ganar nunca el Oscar»
- Digamos que tu película es una película pequeña, aunque para mi es grande, ¿Como has conseguido todo el trabajo de distribución, de dinero, para poder hacer un largometraje tal como está el cine hoy en día?
C.V. – Te digo como lo hago yo, el resto no se como lo hacen. Yo trabajé en el guión y confié en el guión para buscar todo, en tener un guión sólido y desde ahí conseguimos la financiación de productores privados, conseguimos que se involucrase Canal+, Avalon, acabamos la película y entonces entró TVE pero siempre ha sido mi gran baza para conseguir todo el guión, tener un guión redondo para convencer a la gente que tiene que invertir el capital.
- ¿Hasta donde crees que puede llegar la película?
C.V. – Nunca digas nunca, nosotros nunca pensamos en ganas la Concha de oro, ni de plata, no quiero pensar más allá. Quiero pensar en mañana, en el estreno, que la gente vaya a verla dentro de las limitaciones de que sean 40 copias y no 200 y que la película viva, viva en la mente de los espectadores y que la película crezca desde ahí. Eso es lo que me gustaría.
- ¿Próximos proyectos?
Carlos Vermut – Estoy escribiendo un par de películas pero no se cual de ellas voy a hacer, cuando acabe toda esta vorágine de entrevistas me sentaré tranquilamente y decidiré cual quiero hacer.
- Esperamos verla pronto.
C.V. – Yo también gracias.
Gracias a ti por la entrevista y mucha suerte con el estreno de esta maravilla que es Magical Girl.