Puntuación:
La película de Andy Muschietti es un entretenimiento más o menos eficaz que quizá tiene que pagar demasiados peajes relacionados con el particular puzle superheróico en el que tiene que encajar
Flash puede ser el puente perfecto para enlazar las versiones anteriores del universo cinematográfico DC con las futuras más inmediatas, que contarán con la supervisión del cineasta James Gunn. La base de esta aventura del rapidísimo superhéroe es el cómic Flashpoint, guionizado por Geoff Johns, dibujado por Andy Kubert y entintado por Sandra Hope y Jesse Delperdang. Aquella aventura en papel nos mostraba las consecuencias que tenía en el devenir de las diferentes versiones de la Tierra cuando Flash decía viajar atrás en el tiempo para evitar el asesinato de su madre. No obstante, el director Andy Muschetti y la guionista Christina Hodson han cogido algunos elementos del tebeo de origen para adaptarlo al mundo cinematográfico ideado por Zack Snyder y convertir en canon casi todas las versiones previas a él.
Ezra Miller en Flash. Warner Bros
El resultado es una película curiosa que, sin embargo, no acaba de ser redonda. Se agradece que sus responsables hayan sabido incluir con acierto el elemento melodramático, la muerte de la progenitora del protagonista, dentro de la habitual sucesión de luchas y efectos especiales. A este respecto, hay que señalar la buena labor de Maribel Verdú, encargada de dar vida a la mamá del héroe, y su buena química con Ezra Miller, que da vida al joven velocista.
Sin embargo, el largometraje avanza a trompicones como si quisiera tratar demasiados temas y no acabara de dar con el tono preciso. Así resulta un tanto cargante la inclusión de una versión más o menos cómica de Flash perteneciente a otra versión de la Tierra o las maniobras que usan sus responsables por realizar una reorganización del universo donde versiones anteriores de él se conviertan en canon y preparar el terreno para lo que Gunn pueda hacer. Por otra parte, y a consecuencia de ello, hay una excesiva acumulación de personajes que no siempre están bien desarrollados, como el general Zod o la aparición de Supergirl. A todo ello hay que añadir un CGI que recuerda por momentos al terrible utilizado en la primera versión de Liga de la Justicia.
Ezra Miller, Ezra Miller y Sasha Caye en Flash. Warner Bros
Pese a todo, Flash funciona como un entretenimiento más o menos eficaz que quizá tiene que pagar demasiados peajes relacionados con el particular puzle superheróico en el que tiene que encajar. Por otro lado, permite a los fans recuperar al Batman encarnado por Michael Keaton e integrar a otros personajes de versiones previas del universo DC en un conjunto que remite en muchas ocasiones al clásico de las viñetas Crisis en Tierras Infinitas, obra del guionista Marv Wolfman y el dibujante George Pérez.