Sinopsis:
Jackie está decidida a triunfar como culturista y se dirige a Las Vegas para participar en una competición. En su camino, pasa por un pequeño pueblo de Nuevo México donde conoce a Lou, la solitaria gerente del gimnasio local. El padre de Lou es traficante de armas y lleva las riendas de un sindicato del crimen. Jackie y Lou se enamoran. Pero su relación provoca violencia y ambas se ven inmersas en las maquinaciones de la familia de Lou.
Según entré al cine un chico muy amablemente me entregó una especie de carnet de gimnasio, eso ya hacia prometer que la proyección seria algo diferente.
Este thriller entre romántico y dramático llega dirigido de la mano de Rose Glass directora y guionista inglesa. Bajo sus ordenes como reparto principal, Kristen Stewart, Katy O’Brian, Ed Harris, Dave Franco y una sorprendente ,casi irreconocible Jena Malone.
Decir que la película me ha dejado ojiplática (Definición: Con los ojos como platos, muy asombrada y o sorprendida) es poco.
Añadir que aún queda mucho cine por hacer, que sorprende ya sea de modo positivo o negativo.
En principio pensaba en la iniciales escenas de sexo, tirando a fuertecillo, que sinceramente creía innecesarias pero, llegados a un punto de la película, esas escenas pasan a ser algo muy secundario de lo cual uno va olvidándose casi por completo. Tiene incluso pequeños matices de humor irónico en ciertas secuencias.
¿Interpretación? genial, las dos «protas» intercalan sus roles de chica chunga dura a sensible pastel que es una maravilla y están increíbles. A Katy O´Brian la recordaba por su reciente papel en Ant-Man y la Avispa: Quantumanía, ahora, su físico en esta película es increíble, no me extraña que hace tiempo fuera oficial de policía en su vida cotidiana. Kristen Stewart hace sentir que este papel es como una segunda piel para ella, lo borda y transmite solo con pestañear.
Actuaciones sublimes que sorprendentemente hacen sombra a un Ed Harris de imagen impactante pero, algo básico y plano en interpretación. Le mantienen en una pose de «yo soy el matón más duro». Punto.
Leñe tengo que admitir que el argumento es bueno y la trama engancha pero de verdad ¿Qué sucede con los finales?. Mi cerebro a decidido asimilarlo como una metáfora, rara.
Curioso, no puedo decir que sea mala y tampoco buena es algo tan extraño, un amor odio maravilloso, algo loco y diferente que no se como catalogar. Sencillamente es desconcertante y diferente con ciertos aires de cine de antaño.
Si algo tengo claro es que ver «Sangre en los labios» resulta inolvidable así que ánimo y al cine.
Mila Marcos