Crítica de Star Trek: Más allá

El director Justin Lin ofrece una entrega confusa y de vacía espectacularidad que solamente brilla intermitentemente.

J. J. Abrams abordó la transformación de la franquicia Star Trek como si se tratara de la remezcla de una canción. El cineasta mantuvo algunos temas recurrentes en la saga, sometió a un lifting rejuvenecedor a sus personajes y aportó unas dosis de acción más propias de la gran competidora de la franquicia: Star Wars. Todo ello sin olvidar el pasado de un universo que se ha expandido por series de televisión y varios largometrajes de cine durante décadas. Frutos de esta nueva reformulación fueron dos películas de ciencia-ficción más que estimables: Star Trek (2009) y Star Trek: En la oscuridad (2013).

Crítica de Star Trek: Más allá

En Star Trek: Más allá, Abrams deja la dirección en manos de Justin Lin para limitarse a labores de producción. El nuevo realizador prosigue con la nueva visión de la célebre creación de Gene Roddenberry para aumentar más si cabe las secuencias de batallas y peleas. A todo ello hay que añadir una mayor presencia del humor, un elemento que se puede explicar por la presencia en el guion del actor Simon Pegg, que hasta ahora se había limitado a dar vida al personaje de Scotty.

El resultado es una película peor construida que sus inmediatas predecesoras. Lin, responsable de varias entregas de Fast & Furious, confunde en numerosas ocasiones acción con barullo sin lograr que las secuencias de acción sean lo dinámicas que debieran.

Tampoco ayuda demasiado a elevar el conjunto un libreto que no saca demasiado partido de la historia que cuenta. Los deseos de los personajes de Kirk y Spock de abandonar la tripulación del Enterprise están meramente apuntados, la crisis en la relación entre el segundo y la teniente Uhura aparece muy desdibujada, y el villano, un enemigo de la Federación Unida de Planetas al que da vida del siempre magnético Idris Elba, se encuentra francamente desaprovechado. Por si fuera poco, algunos pasajes son muy confusos, aunque no sabemos muy bien si por un montaje inadecuado o un tijeretazo en el guion.

Pese a todo, Star Trek: Más allá no naufraga del todo por el buen hacer de Chris Pine y Zachary Quinto, que vuelven a dotar de carisma y emotividad a Kirk y Spock, y a algunos momentos cómicos protagonizados por Karl Urban, que brilla en su papel de doctor ‘Bones’ McCoy.

Crítica de Julio Vallejo Herán