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Puntuación:
Simpática cinta de superhéroes, artes marciales y fantasía que tiene sus puntos fuentes en su ligereza, humor y falta absoluta de pretensiones más allá del mero entretenimiento.
Shang-Chi y la leyenda de los diez anillos tiene una ventaja respecto a otras adaptaciones Marvel a la gran pantalla. Su protagonista no forma parte de la primera división de La Casa de las Ideas y sus guionistas han podido sentirse libres para poder crear una historia sin demasiadas cortapisas.
Por otra parte, en esta primera adaptación, no hay excesivos lazos con el resto de las películas del particular universo creado por Stan Lee y los responsables han acertado al acentuar los elementos del determinado wuxia, género oriental donde predominan las artes marciales y los elementos fantásticos.
El director y coguionista Destin Cretton, responsable de las más intimistas Las vidas de Grace y El castillo de cristal, dota al conjunto de un necesario toque de melodrama, que enfrenta al protagonista y a su hermana con un padre con malas artes y deseoso de recuperar por cualquier motivo a su esposa fallecida, y sabe introducir con habilidad ingredientes de humor, incluso en las escenas de lucha, especialmente a través del personaje de novia/amiga del héroe que encarna con brillantez y ternura la actriz Awkwafina.
Quizá la clave de este Shang-Chi y la leyenda de los diez anillos sea su sencillez argumental y su refrescante apuesta por un divertimento donde no haya subtramas innecesarias que distraigan y todo se siga con la necesaria ligereza. Es cierto que se alarga en algunos pasajes en exceso, pero eso no es obice para que el largometraje sea efectivo.
Al resultado final contribuye un perfecto casting donde, además de las citada Awkwafina, sobresalen Tony Leung, en el papel de atormentado villano; Michelle Yeoh, como la aguerrida tía del protagonista, y un simpático Simu Liu, que encarna a un superhéroe de buen corazón y sin demasiadas aristas.
Shang-Chi y la leyenda de los diez anillos no es el colmo de la profundidad ni lo pretende, pero resulta más honesta que otros entretenimientos de Marvel y Disney con más ínfulas y peores resultados.
