’11M La voz de los inocentes’. Un proyecto tan respetuoso que es digno de admirar.

Compartir una hora de una tarde de otoño, es una cafetería céntrica de Madrid con Juanjo Castro, para hablar de su nuevo proyecto cinematográfico ’11M La voz de los inocentes’ junto con Diana Garrido y Beatriz Álvarez de La piña comunicación de verdad que ha sido un placer. Transmiten entusiasmo por su proyecto, pero con una serenidad envidiable, ya que el tema a tratar lo requiere.

Según Juanjo Castro, el director de esta película, todo el que se embarca en una aventura de este tipo, sobre todo de cine, ‘hay que estar loco y rodearse de locos para trabajar’, es una forma un tanto literaria de hablar, pero deciros que todo lo contrario tocar un tema tan delicado requiere unos grandes sentimientos y desde luego de loco nada, un gran corazón y con los pies en el la tierra. Para hablar con tanto tacto y respecto de lo sucedido aquél fatídico 11M hay que tener una sensibilidad especial y su lenguaje es tan sutil que no puede herir a nadie ni mucho menos, porque sobre todo se nota el homenaje que todas sus frases conllevan como mensaje. Y se nota porque su película es desde el punto de vista de los que perdieron ese día: de las víctimas.

La idea surgió hace años, desde el 2006 pero no se hizo un guión propiamente diseñado junto a Javier Muñoz hasta el 2009. Es ahí donde se parte de unas historias documentadas a través de internet y que ‘queremos tratar la película de una manera coral, desde un primer momento teníamos claro que queríamos hacerlo en un tono cotidiano’. Los hechos van a ser contados de una forma lineal, comenzando con el amanecer del día con alguien que entra en un tren.

Lo primero que hizo cuando comenzó a tener todo más o menos en marcha es ponerse en contacto con las asociaciones: Asociación 11M Afectador del Terrorismo y la Asociación de Ayuda a las Víctimas del 11M y con cuyo apoyo cuenta. También lo hizo con la AVT, pero ésta no ha estado interesada en el proyecto aunque tampoco está en contra, simplemente no quiere figurar. Y algo que el director sí que quiere que recalquemos es que Renfe, como tal, no quiere colaborar con ellos ni les va a prestar ningún tipo de ayuda.

Plantean unas historias desde el lunes 8 hasta el jueves 11, independientes unas de otras con un nexo común: los trenes de cercanías. Va a constar de cuatro historias principales y tres secundarias, ‘queremos que el espectador se identifique perfectamente con los personajes, si ven al personaje peruano, puedes pensar que es tu vecino, la historia de un hombre prejubilado, puede ser tu tío, porque el espectador juega con una baza importante que sabe que ese día en concreto algo va a pasar’. No entran en temas políticos ni policiales porque están contando lo sucedido en los días previos.

Durante ese tiempo tuvo la sensación que alguien podría estar pensando en ese mismo proyecto y que se adelantaría al suyo, pero de momento desde la mirada que él lo plantea nadie lo ha hecho. Pero claro el guión está pero no el dinero para desarrollarlo, algo fundamental hoy en día para sacar adelante cualquier cosa, ahí está su freno: el encontrar el dinero para sacar adelante la película y de momento la única forma que se le ha ocurrido es hacerlo por medio de Crowdfunding, Este método aunque parezca novedoso ya lleva tiempo haciéndose en otros países y aquí en España debido a los recortes en subvenciones a la cultura y falta de productores que avalen los proyectos está cogiendo mucho auge, tanto para cine como música.

Crowdfunding consiste en la financiación en masa o mecenas como algunos lo denominan, son aportaciones de gente para sacar adelante un trabajo. Las aportaciones pueden ser a partir de 10 euros, y digamos que dependiendo del dinero entregado cada uno tiene derecho a algo. La plataforma Join my proyect es la que está gestionando esto y el director ha establecido los tramos y regalos correspondientes: película en DVD, accesos a rodaje, etc…

Nosotros desde Cineralia deseamos que esta película salga adelante, porque se les nota las ganas que tienen que todo llegue a buen puerto y tienen claro que ‘hay que lanzarse sino no sale adelante y después de tantos años no lo voy a dejar ahí’, comenta el director.