Echabais de menos una propuesta con plantel argentino en la cartelera, pues estáis de enhorabuena con Inevitable del director Jorge Algor.
Federico Luppi y Dario Grandinetti, dos grandes de vuelta a escena.
Fabián (Darío Grandinetti), trabaja como ejecutivo en un banco, como en todos los trabajos la cosa no marcha muy bien y hay despidos, eso y la muerte de un compañero con quien ha trabajado durante muchos años pero que finalmente se da cuenta que no conocía, hacen que entre en una debacle emocional y existencial, replanteándose muchas cosas de su vida.
Su mujer Mariela (Carolina Peleritti) es psicóloga y actualmente tiene como paciente a Olga (Mabel Rivera) que refleja sus problemas en ella. Un día deambulando Fabián conoce a un famoso escritor ciego (Federico Luppi) quien solo oír su tono de voz, aún sin conocerle, reconoce que las cosas no le marchan bien.
Su recomendación no es otra que Fabián comience una relación con Alicia (Antonella Costa), una joven que se dedica a la escultura y que conoció de casualidad en una exposición de un amigo, y este escritor cree que para él será un amor inevitable.
Dentro de las crisis que uno plantear en el hombre, la que se refleja aquí aunque parezca efímera y pasajera a primeras luces, se me antoja a la vez como más profunda y totalmente existencialista, este patrón que se muestra de hombre de negocios que ve que ha dejado pasar su vida sin pasión, sin metas, cuando encuentra una vía de escape no duda en cogerla, aunque ¿hasta dónde será capaz de llegar el hombre en sí por un amor inevitable?
El guión de Inevitable muestra las trabas de la vida ante los deseos, si seremos o no capaces de medir las situaciones, todo ello con una trama circular donde todos los personajes están relacionados entre sí, y hasta ver que hasta el más mínimo detalle de la historia no hay que dejar desapercibido para saber interpretar uno a uno cada movimiento y cambio de los personajes, porque todo tiene una razón y un porqué.
Sobra decir que este tándem que forman Luppi y Grandinetti es sublime, pero hay que destacar sobre todo a Grandinetti que es quien soporta la mayor parte del metraje, y lo hace como nos tiene acostumbrado con una soltura natural, que hace que todo se desenvuelva con espontaneidad y elegancia, su tono de vez como siempre cautivador, todo un gentleman de la pantalla, ayudado eso sí por una buena base que no es otro que el guión de Jorge Algor y Héctor Carré.
Otro aspecto a destacar de Inevitable es la música de Berrogüetto, no perdáis detalle de la canción Inevitable que desde luego comprende todo lo que se ha reflejado anteriormente en pantalla. Además la frase de “El amor verdadero siempre vuelve” tiene un gran significado porque aunque parezca y pensemos que todo gira en torno al personaje de Grandinetti hay otra trama de sub fondo que descubriréis a lo largo de los minutos y que contiene el significado de todo lo expuesto con misterio. Ahora es bien, como buena película te hará pensar y sobre todo con la escena final.