Crítica de I am your father
Toni Bestar y Carlos Cabotà cuentan cómo Prowse entró en Star Wars como una estrella, debido a sus papeles para la Hammer, y poco a poco fue siendo marginado por Lucas Films.
El documental, como es fácil adivinar por el título, se centra en la figura de David Prowse, el hombre que se ocultó tras el disfraz del villano Darth Vader.
La idea que da vida a este documental es profundamente romántica: la reivindicación como estrellas de estos actores que hicieron carrera en el cine fantástico detrás de un disfraz, detrás de una máscara. El malogrado Christopher Lee, por proflífico y polifacético, es uno de los pocos que ha tenido la suerte de trascender la etiqueta del hombre-monstruo que se esconde tras los disfraces, en gran parte, de las criaturas que fueron alma mater de la extensa producción de la Hammer entre los años 40 y 60.
El documental, como es fácil adivinar por el título, se centra en la figura de David Prowse, el hombre que se ocultó tras el disfraz del villano por antonomasia de la historia del cine, Darth Vader, en la trilogía original.
Toni Bestar y Carlos Cabotà cuentan cómo Prowse entró en Star Wars como una estrella, debido a sus papeles para la Hammer, y poco a poco fue siendo marginado por Lucas Films, ya que ni su voz (recordamos que la ponía Jack Earle Jones) ni su rostro (cuando era revelado al final del Retorno del Jedi) aparecieron nunca en la pantalla.
Aunque la película intenta hacer justicia (y en cierto modo la hace) con la figura de David Prowse, el resultado final resulta descafeinado debido a los problemas legales con Lucas Films (que entre otras cosas impiden mostrar el clímax de la historia) y la falta de un punto de vista interno de la productora.
I am your father es un quiero y no puedo en realidad, pero también es un bonito homenaje a una gran persona y a un mito del cine que ni siquiera ha caído en el olvido, porque jamás se le permitió estar en la memoria colectiva del público.