Analizamos la nueva novela del escritor inglés, autor de obras tan importantes como El espía que surgió del frío o El jardinero fiel.
Esta es la crítica de Una Verdad delicada de John Le Carré.
En Gibraltar, la colonia del Reino Unido en España, se organiza una operación contraterrorista llamada Fauna, los responsables un ministro del Foreign Office y su íntimo amigo, un contratista de defensa privado.
El asistente personal del primer ministro, Toby Bell intenta impedir la operación, pero inmediatamente es apartado del caso y se le ubica en un destino en el extranjero. Tres años despues, y como diplomático británico jubilado, vigilado de cerca por Emily, la hija de Probyn, Toby deberá elegir entre la conciencia y el deber.
John Le Carré, a sus 84 años, vuelve a escribir un sólido relato, una historia de espías y de misiones secretas con trasfondo político, que emana cierta crítica, no sin acidez, al laborismo rancio de Tony Blair. Una historia que gira en torno al dudoso valor y a los ausentes principios de alguno de sus protagonistas.
Le Carré dispone a los protagonistas de Una verdad delicada en función de su grado de concienciación moral y de la fuerza e integridad con que la que cada uno defiende la misma, en una narración ágil y adictiva, con el sello propio del maestro.
Tras inumerables adaptaciones literarias al cine tanto de Le Carré, como de otros grandes autores de Best-seller como Tom Clancy o Grisham, uno no puede evitar al leer Una verdad delicada relacionar su intrincada trama con el lenguaje cinematográfico. Y más en una novela con una estructura repleta de flashback, con una historia repleta de secuencias y largos diálogos.
Eso si, John Le Carré, consigue una vez más seducirnos con una lectura voraz, seria y muy alejada de cualquier atisbo de irrealidad. Un libro recomendado para los amantes de las lecturas ágiles y de la solidez de un veterano como Le Carré.
No hay comentarios
Pingback: Bitacoras.com