
Película dirigida por Kike Narcea con Mario Mayo, Diego Paris, Fabia Castro, Raúl Jiménez, Miguel lago Casal y Fernando Gil en el reparto.
Gabriel es un exboxeador que vive en una aldea retirada de la ciudad junto a su padre y a su perro, Pepe. Tras pasar unos años en prisión, ha roto con su pasado y está dispuesto a llevar una vida normal, si le dejan.

Llevaba tiempo deseando verla por que como en su día le dije a Kike (Kike Narcea) tras hablar con el un poco, adquirí el compromiso de verla por que si, por que me da la gana y por que yo lo valgo como loreal. (Un abrazo gigante Kike que te tengo un sincero cariño).
Hay varios actores amigos y queridos en ella que me complican la tarea de ponerla verde así que vamos a echarle «bemoles» como «El Tarado». (Jejeje)
¿Qué si hay detallitos que me resultaron «regulinchis»? bueno alguno hay pero igual no es momento de ponerse «tiquis-miquis «. Si hacemos balance y la suma de los totales, resulta ser un cine como muy de antes, realizado con cariño con actores que molan bastante y en el que se reparte leña de la buena a tutiplen.
Tenemos un «Statam» español y lo desconocía, bueno no, le conocía pero ignoraba sus aptitudes por que anteriormente le había visto en otro registro distinto y no muy extenso. Mario Mayo me ha sorprendido gratamente en varias secuencias del filme , así como me ha gustado mucho el rol de Fernando Gil, todo hay que decirlo. Hay que resaltar los papeles femeninos con esa tremenda fuerza.
No puedo dejar de nombrar a mi muy querido amigo Miguel Lago (bien lo sabe el), que nos tiene acostumbrados a papeles más rudos, más cañeros y chungos, aquí recibe una somanta de palos hasta en el carnet de identidad.
Bueno en resumidas cuentas compañeros que, tenemos aquí un cine sin pretensiones sin un exceso de presupuesto ni efectos especiales a lo «Bad Boys » que oye llega convence bastante y entretiene lo que a día de hoy no es poco. Ahora si buscáis una película de acción y drama de las de 20 tomos a nivel enciclopedia pues, creo que actualmente no hay ninguna en cartelera y eso; Que lo prometido es deuda y aquí queda saldada con una chispa de pillería, perspicacia y todo el cariño y respeto del mundo.
Kike, hacer el cine que uno quiere y el que le gusta, siempre es una muestra de valentía. Gracias.
Mila Marcos