Lo más entrañable de la cinta es sin lugar a dudas el robot que acompaña al protagonista en sus aventuras como superhéroe.
El corto Buenas Migas precede a Big Hero 6
Big Hero 6 tiene lugar en una familia…de cerebritos. Con un joven obsesionado con los robots de pelea como protagonista, el hermano mayor intenta motivarlo para que entre en la Universidad en la que él estudia e investiga. Logra su objetivo y el pequeño acude a unas presentaciones de tecnología en las que podría conseguir una entrada a la escuela. Aquí sucederá algo que lo llevará a convertirse en un superhéroe. Lo acompañarán los compañeros de su hermano en su imprevista aventura.
La película resulta algo clásica dentro del mundo de Disney. Simpatía y buenas caras. El mensaje de esta película recuerda a algo que dijo Woody Allen hace años: “mi segundo órgano favorito es el cerebro”, aunque la compañía de Mickey Mouse se olvidan del que según el director debería obtener el oro. Big Hero 6 no agota; resulta ligera y entretenida. Muy apropiada para los niños y además muy llevadera para los mayores. Los adultos encontrarán momentos con un humor muy fresco y una historia bastante interesante. Lo más entrañable de la cinta es sin lugar a dudas el robot que acompaña al protagonista en sus aventuras como superhéroe. Protagoniza la mayor parte de los momentos más graciosos con guiños para todas las edades. La mayor traba de este personaje es que recuerda demasiado su condición de no humano. Por gracioso que sea, no deja de decir: “soy un robot”, equivalente a decir “no sientas nada por mí, son una cosa sin sentimientos, como tu móvil”.
Big Hero 6 está muy bien dirigida, consigue en ocasiones la sonrisa solo con imágenes ocurrentes. Las escenas de acción son fáciles de seguir y no marean en exceso. Resulta elogiable la utilización del 3D solo como recurso para introducir más en la historia, sin agobiar con él. Esto también se puede ver por el otro lado, y es que el complemento en esta ocasión no aporta en exceso más que en unas pocas escenas que se podrían contar con los dedos de media mano.
Un guion original con personajes bien definidos. Las bromas logran hilar la cinta de tal manera que resulta muy ligera. Diálogos ágiles en una historia muy llevadera aunque habría podido ser mucho más arriesgada.
Big Hero 6 es un buen producto de Disney, aunque, en esta ocasión, no llega a la altura de Rompe Ralph. Sin lugar a dudas el robot es gracioso y entrañable, pero carece de una fuerte personalidad como sí tenía Ralph. El niño, pese a ser un cerebrito, no es ningún listillo. Los personajes funcionan muy bien juntos como equipo, incluso cuando no son capaces de cumplir con su misión. Por supuesto, los mensajes Disney siguen ahí sin muchas necesidades, ni ganas, de esconderlos.
Las dos últimas notas a analizar ponen la película entre un paréntesis.
Cortometraje Buenas Migas
Antes de la cinta se puede ver un corto titulado Buenas Migas. Tiene una bonita historia, muy ágil. No es la mejor que se nos ha presentado, pero el perro que la protagoniza es de lo más entrañable y simpático. Una historia simple pero muy bien narrada. Aprovecha el 3D muy bien, incluso mejor que la propia película.
Al terminar la película se ve lo que antes no era más que una aparición, el cameo de Stan Lee. Es gracioso, más que por otros motivos, por ver al creador de tantos personajes ahora en su versión animada. En esta ocasión toca quedarse a observar los nombres de todos los responsables de hacer esta película si se quiere ver por completo.
Big Hero 6 es una buena producción. Es muy apta para los adultos y la mayor crítica que se le puede hacer es que es poco arriesgada. Pese a durar casi dos horas, no se hace larga en absoluto.
Lo mejor: el robot y el corto.
Lo peor: que podrían haberse atrevido a arriesgar un poco más en la historia e incluso en el guion.