El actor vuelve a los teatros con El intérprete, su obra más personal, donde Asier Etxeandía se desnuda emocionalmente.
Asier Etxeandia es de esos actores que no para de sorprenderte en cada una de sus actuaciones, tiene un gran feeling con la cámara en todas sus interpretaciones y lo que es más una voz que empasta a la perfección con su imagen sin desentonar en ningún momento, y no lo digo por su obra El intérprete solamente, donde la voz es su gran arma de fuego, si no por su dicción y su sonido cálido en el cine y televisión que para nada desentona, si no que sube el nivel de su actuación.
Ahora después de tres años vuelve a los teatros con El intérprete, esa su obra más personal, donde se desnuda emocionalmente cada día al subirse el telón y se queda vacio y extasiado cuando se baja el mismo. Es camaleónico y lo da todo en las tablas, da igual que sea la representación total o un pase de cara a la prensa y sus fans. Ahora viene más grande que nunca, con su banda XXL, y con esta pequeña gira, con la que dice que quiere cerrar el círculo de éste su proyecto más sincero y que le acerca mucho más al público, siendo para él todo un ritual cada día que se expone al juicio de los que están disfrutándole, regalándonos esas dos horas de actuación y de música donde haciendo todo un homenaje a su familia y a su gran pasión, la música.
En estos días que estará en el Teatro Calderón, además de deleitarnos con su gran interpretación, van a grabar una película y un disco sobre su obra de teatro.
El intérprete es más que una obra de teatro, es tu viaje interior exponiéndote en cierta forma al espectador. ¿Ya has perdido el pudor, o todavía sigue en cada función?
Hay pudor siempre, hay que enfrentarse siempre a ello. Forma parte del proceso y si no lo hubiese no te importaría, si importa pasan cosas por dentro: están las ganas, está el pudor, las mariposas en el estómago, cierta vergüenza, muchas ganas de comerse el mundo, todo; hay muchos sentimientos en pugna que hay que ordenar.
Cada salida al escenario es un cambio de piel, una transformación. ¿Que te dejas y que te llevas?
Me suelo quedar vacío, pero aprendo mucho de todos los personajes. Los actores tenemos una gran universidad emocional, dedicándonos a lo que nos dedicamos, ten en cuenta que nos pasamos horas haciendo análisis de texto, intentando entender personajes que hacen cosas terribles, como Medea que mata a sus hijos, nos colocamos en la piel de situaciones inverosímiles, te pone en un lugar de comprender y no juzgar mucho al ser humano, gran inteligencia emocional. Y tengo una profesión que es milagrosa para eso, hace que entienda muchas situaciones y de auto expiarme a mí mismo.
¿Y en El intérprete en concreto?
Pues imagínate, es el mayor deporte de riesgo con respecto a lo que te he contado, porque es una exposición total y me sé la cocina, entonces sé cuando me estoy engañando y cuando no. Estoy en continuo examen de mi mismo, es un poco agotador pero muy gratificante. Es cierto que me quedo vació, pero también en una especie de éxtasis cuando termino.
¿Cómo contienes la emoción cada vez que dedicas una canción, por ejemplo con la que dedicas a tu padre, como consigues continuar el espectáculo?
Me gusta conectar con los sentimientos, lo que me cuesta es cuando un actor está duro, o pasan cosas a tu alrededor que te hacen distanciarte de ti mismo, de tus verdaderos sentimientos o de los de la persona de enfrente, entonces ahí es cuando me cuesta seguir. Cuando conecto con un sentimiento real, es cuando sé que estoy en el buen camino, estoy siendo humano, viviendo coño, me siento vivo. Cuando me emociono con mi padre, sé que es de un lugar de amor muy grande, entonces no es una pena, es un homenaje precioso y me da más fuerza seguir. Cada vez que me emociono con algo, me enciende el motor.
De lo que querías hacer con tu proyecto a lo que se ha convertido ¿Se ha caído algo por el camino?
Me han cambiado los objetivos, se ha caído desde donde quiero hacer las cosas, porque quiero hacerlas. He aprendido que menos es más, aunque sea muy intenso, soy así, siempre busco el porqué del sentido de las cosas, y la excelencia y lo seguiré haciendo toda mi vida; pero sí es cierto que me ha colocado en un lugar de paz, más relajado, quiero disfrutar más de todo.
¿La paz la has conseguido en los últimos años?
Sí, en los últimos años, han ocurrido muchas cosas junto con El intérprete que han hecho que cambie. Ha sido un espejo, auto expiación y un entender el teatro justo a los cuarenta años, he encontrado un crecimiento interesante en todo esto.
El comienzo de la obra es un poquito nostálgico, un puntito reflexivo, que va subiendo de nivel con la música, ahí vas metiendo bastante ritmo, y alguna que otra puyita política, ¿A Asier Etxeandia le gusta incluir cosas de la actual realidad social?
Sí, pero no desde un lugar panfletario.
¿Reivindicativo?
Sí, pero desde la inteligencia emocional, creo mucho en la gente y en una conciencia global de todos, en cierto sentido común y me gusta recordarlo, no desde un lugar cerebral si no desde un lugar de necesidad de respecto al de enfrente, y cuando hay cosas que han faltado a mí me ha llegado. No tengo mucha idea de política a nivel de datos e información, pero creo que como artista hay que ser político, hay que dejar claro lo que no te gusta. No tengo la solución tampoco, pero sé lo que me parece aberrante y si tengo la oportunidad de utilizar una forma poética de contarlo, no panfletaria porque eso nunca me ha gustado, pues lo hago.
¿Cuánto tiempo te costó llevar a escena El intérprete?
Muchos años, es decir montarla fue muy rápido, pero gestarla han sido muchos años, de peleas conmigo mismo y de descubrir poco a poco que es lo que tenía que contar. Muchas reuniones, y mucho encontrar.
¿Eres de los que piensas que los sueños se consiguen con perseverancia o hace falta suerte también? Aunque nos has dicho antes en rueda de prensa Haz lo que desees que la vida te va a ayudar
No me voy a sentar aquí diciendo que todo lo que deseas se cumple, fíjate lo que tenemos, se lo cuento esto a un refugiado y me manda a tomar por culo, pero bueno, quizá lo que he tenido a mi alrededor, lo he sabido cómo utilizar y sobre todo a mí mismo he sabido domarme, soñar y trabajar duro, que es la base principal de conseguir las cosas. Trabajar duro y sobre todo desde donde se hace, si proyectas bien algo es muy probable que lo consigas.
Empezaste la obra con tres en la banda y ahora ocho ¿Ese crecimiento ha sido para cerrar el círculo de la obra?
Porque soy un adorador de la música, me gusta mucho un sonido de banda grande, para mí también era muy impactante mi trío, solo los cuatro en escena, muy bonito y que tenía algo de artesanal, que sigue manteniéndose. Lo que pasa es que soy un disfrutón y disfruto mucho de tener un trío de vientos, y de tener a un batería como Pino, que saca toda su ira. Era ya por placer acústico.
El intérprete es todo un homenaje a tu familia y a la música ¿es tu pasión?
Sí
¿Asier Etxeandia te gustaría dedicarte solo a la música?
No
¿Y combinarla con el teatro?
Me gustaría encontrar el camino de juntarlo, como lo he logrado con El intérprete. Y encontrar mi propio camino.
Tres años de gira dan para mucho, has dicho que éste ya es el cierre, pero ¿y si te lo vuelven a pedir?
Bueno veremos, yo solo quiero disfrutar de ésta nueva fórmula de El intérprete en los días que quedan, ya se verá que pasa.
¿Qué te ha aportado? Aparte de la serenidad y los cambios que nos has contado.
Es lo más importante, y que me ha dado un hueco de exposición con la gente, y en la música. Me ha aportado darme cuenta que puedo hacer esto y es lo que quiero hacer.
¿Los amigos invisibles eran tu refugio o también era una vía de escape para dejar soltar tu imaginación?
Las dos cosas, ellos no me juzgaban, me los imaginaba yo y eran perfectos. Podía ser quien me diese la gana, no había juicio alguno, son mi refugio y mi vía de escape, sí.
¿Son?
Sí siguen siendo y además ahora son reales. Quien dice que esto no es verdad y que no es un sueño. Igualmente solo lo estoy soñando y ahora mismo tengo nueve años, y estoy me lo estoy imaginando, igual ahora se cae el telón y estoy en mi cuarto de Bilbao y tu eres una amiga invisible…
¿El fenómeno de Las invisibles es algo alucinante no?
Sí, siempre lo ha sido, desde que lo imaginaba hasta que se cumplió. Les estoy muy agradecido, muy, muy agradecido, me emociona profundamente lo que pasa con ellos.
Asier Etxeandia, ¿De que aprende uno más de los éxitos o de las caídas?
Del éxito se aprende poco, se aprende más de las hostias. El éxito te da la posibilidad y saber que lo puedes hacer, también si eres inteligente te hace darte cuenta de la gran responsabilidad que es tener éxito, a no ser que seas un patán y te valga cualquier cosa; que lo único que quieras es que admiren y brillar, pero si te tomas la vida como yo, pues a mí, no sé, me hace colocarme de un lugar de mayor responsabilidad y mayor conciencia.
¿Tu faceta de productor como en Siempre me resistí a que terminara el verano, se va a volver a repetir?
Estoy, estoy en ello, estamos en ello, porque en el Intérprete somos productores.
Sí pero aparte de obras en las que tú actúes
Sí, puede ser, claro que sí, siempre he querido apoyar otros textos, otras compañías y otras gentes, no sé que de manera, pero puede ser.
¿Y con la banda XXL, has dicho que quieres continuar, tienes algún proyecto con ellos?
Bueno hay cosas, sobre todo grabar el disco y me gustaría seguir en este camino con ellos. Pero no te puedo contar nada todavía.
Te he oído decir que haces teatro para remover, ¿y con el cine o la tv?
Todo, para mí es igual un medio que otro, aunque la televisión es más de entretenimiento, pero siempre tienes la posibilidad de meter tu propia firma e intentar dignificar más lo que haces, aunque no siempre te dejen, intentar dar tu versión de las cosas. Creo que todo arte es para remover, el arte no tiene sentido sin catarsis, no tiene sentido, como mero entretenimiento al final deja de ser interesante, puede ser entretenido durante un tiempo, pero luego se desvanece.
¿Me podrías decir un referente en música, cine, teatro?
Música: Prince, por ejemplo que se acaba de morir, David Bowie, Janis Joplin, Maddona, Michael Jackson
Cine: grandes actores como Isabelle Huppert, kevan Spacey, Meryl Street, Bett Davis, Marlene Dietrich entre otros
Directores: Cassavetes, Scorsese, Almodóvar, Julio Medem
Teatro: Mi gran referente es Tomaz Pandur, que es el que a mí me ha enseñado todo y que se acaba de ir también.
Televisión: soy fan de Juego de Tronos, me parece la puta hostia, me vuelve loco, estoy deseando que llegue la nueva temporada.
Has hecho mucho teatro clásico, ¿te ayudó para hacer tu papel en La novia?
A Lorca lo pongo a la altura de un Dios, y lo tengo estudiadísimo, me ha hecho entenderme a mí mismo, y es todo un cumplido poder hacer Bodas de Sangre, pues lo conocía muy bien, sobre todo el personaje del novio, y ha sido un personaje que he querido dignificar, porque curiosamente siempre he sentido que se tenía una imagen errónea de él, como de blandengue más manipulado, y se cuenta una historia muy grande, que es el despecho de alguien que da todo y no recibe nada.
¿Qué sentimientos tuviste con las nominaciones con La novia?
Pudor, un pudor extraño porque no me tocaba. En el fondo estuve muy ilusionado porque mis compañeros se acordaran de mí, poder formar parte de toda esa familia, que me hayan dejado mi hueco, tomándome en serio y en el cine sobre todo, que es algo pendiente para mí, pues me fascina y que quiero seguir haciendo toda mi vida, fue un regalo, pero por otro lado me daba un poco de pudor estar ahí con Darín, Luis y Casablanc porque ellos eran protagonistas reales, y para mí, yo era de reparto. No me lo iban a dar, pero si hubiera sido así, lo hubiera sentido extraño.
Vas a tener un cambio de registro bastante potente en tu siguiente película, La puerta abierta, ¿te gusta cambiar de registro?
A todos nos gusta cambiar de registro, pero es difícil, aquí hay veces que te encasillan porque das un perfil y es muy complicado salir. Aquí no hay tanta pasta y van a tiro hecho, no es como en Hollywood que un actor se puede desarrollar de muchas formas, aquí tienes que currártelo mucho para dar muchos perfiles, pero creo que a todo actor le gusta fondear en lugares muy contrarios, totalmente opuestos, al menos a mí me fascina es el oro de mi profesión.
¿Nos va a sorprender esta nueva actuación con respecto a otros papeles?
No sé, yo me quedé un poco en shock cuando me vi, es una mujer enorme… no sé qué pensar.
Muchas gracias a Asier Etxeandía desde Cineralia por dedicarnos parte de su tiempo y suerte en todos los proyectos que emprendas en tu vida.