La Fantasía Épica regresa por todo lo alto en esta segunda entrega de la adaptación de la obra del Maestro JRR Tolkien.
No voy a repetir el argumento de El Hobbit: La desolación de Smaug porque ya es de sobra conocido. Pero, no pretendo que esto sea una mera crítica en la que se diga simplemente si la película es buena o no, porque además creo que como conocedor de la obra de Tolkien no le haría mucha justicia si me limitase a eso. Por otro lado, y de cara a todos los que dicen que no entienden por qué Peter Jackson está haciendo esto, solo tengo una respuesta, que es la que daría mi amigo El Nota: “Sí bien, ya sabes…esa es tu opinión tío”.
Como lector de la obra, afirmo que comprendo perfectamente por qué Jackson ha decidido alargar la historia. De hecho, para todos los que no se hayan enterado, el director comunicó durante el rodaje, que había pensado en hacer no dos sino tres películas debido a la cantidad de material que tiene. ¿Cuál es ese Material? Pues las últimas páginas que se pueden encontrar en cualquier edición del tercer volumen de El Señor de los Anillos, que Tolkien bautizó como Apéndices. Son fragmentos como los cuentos inconclusos, añadidos que aclaran acontecimientos de la historia y que explican mejor, entre otras cosas, por qué Sauron está en Mordor, o cómo se conocieron Gandalf y Thorin y se les ocurrió recuperar Erebor.
Si bien es cierto que Jackson ha modificado sustancialmente el devenir de los acontecimientos tal y como están puestos en el papel. Por ejemplo, antes de comenzar la aventura con los enanos y el hobbit, Gandalf ya sabe que el Nigromante de Dor Guldur es Sauron, es decir, no lo descubre por Radagast el Pardo ni a lo largo de la misión con los enanos como ocurre en las películas.
Además de que en Dor Guldur ocurre algo muy importante, y es que el padre de Thórin, Thrain, se encuentra prisionero en ese lugar, desquiciado a nivel psicológico. Gandalf le encuentra y es en ese momento cuando adquiere el mapa y la llave que le entrega a Thórin. Aun así, el director lo ha sabido aprovechar bien, dejando la miel en los labios para los fans ante la pedazo de pelea que tendrá lugar, si los Valar quieren jeje, en la tercera película, una batalla que nos aclarará por qué Sauron acaba instalándose de nuevo en Mordor, y en la que Gandalf no estará solo. Otro de los cambios de El Hobbit: La desolación de Smaug respecto de los Apéndices es la reunión con Thorin en Bree, en los originales es el propio enano el que se acerca al mago cuando le ve sumido en sus pensamientos y le menciona sus intenciones. En la película pasa todo lo contrario, pero pienso que no son más que detalles nimios.
Quizás los añadidos particulares de Jackson sean el personaje de Tauriel, interpretado por Evangeline Lilly, y desde luego un añadido muy acertado porque es un personaje estupendo que le da mucha emoción a la historia y a través de ella podemos conocer un poco más a Légolas, que también aparece en esta historia por obra y gracia del director, pues en el original es inexistente, aun así, se le saca mucho partido porque el que sí que aparece es el Rey Elfo del Bosque, Thranduil, padre de Légolas, un tipo bastante déspota todo hay que decirlo.
Y vemos también un mejor tratamiento del personaje de Bardo, que en la película cobra mayor profundidad de la que tenía en el libro, y eso que es uno de los más importantes pero no revelaré por qué.
Desde luego que los libros tal y como los concibió Tolkien me encantan, pero al mismo tiempo creo que no se debe despreciar ni vilipendiar lo que ha hecho Peter Jackson bajo el prisma del purismo y la supuesta falta de respeto al original. Las mayores críticas proceden del encuentro final con el magnífico dragón Smaug al que el siempre genial Benedict Cumberbatch presta sus movimientos y voz para lograr otro gran personaje que, al igual que Gollum, ha logrado cautivar a todos los espectadores. Sobre todo el argumento para criticar esta parte es que se ha excedido mucho la duración de dicho encuentro. Como decía al comienzo, esa es una opinión más. La realidad es que el estilo de El Hobbit, refiriéndome al libro, difiere mucho del que podemos observar en el Señor de los Anillos, por eso no me cansaré nunca de decir que no se pueden comparar ambas historias porque aunque estén conectadas, son absolutamente distintas.
Quizás subyace en ambas la batalla del Bien y el Mal y los mensajes sobre la Codicia y que el Poder corrompe al ser Humano, pero desde luego en la concepción son diferentes. Al leer el Hobbit, concretamente la parte del encuentro con Smaug, se puede observar que la escritura da la idea de que no es ni mucho menos una charla de cinco minutos, y por otro lado, la furia que desata el dragón porque Bilbo le ha robado una copa dorada ( también sustituido en el film) es muy intensa pues Smaug se pasa mucho rato destruyéndolo todo en el interior de la Montaña antes de salir volando hacia la Ciudad del Lago. Por todo ello opino que no es mala idea la concepción de Jackson sobre esto.
Tras todo esto muchos os preguntareis: Entonces ¿Merece la pena ver El Hobbit: La desolación de Smaug o no? Una vez más, mi opinión es que es maravillosa en todos los sentidos y que desde luego es una de las mejores películas del año. Ahora y como siempre digo, vosotros elegís.
Una Crítica de cine de Ramiro González.
ami me parece fantástica y disfruté cada segundo. Me parece increible el trabajo que se hizo para realizarla y la verdad la adoré. también me gusta Tolkien, y como decis, ambas historias son diferentes, pero creo que la historia central es una, más allá de los adornitos que ponga peter jackson. Agregar a la elfa me pareció bien, ya que no hay mujeres. la aparición de orlando bloom también me gustó y los personajes están bien idealizados.
Comparar el señor de los anillos con esto como hacen muchos esta mal (creo yo). Por que los dos son motivos muy diferentes. De alguna manera estamos hablando de un ladrón (bilbo), aca los orcos no van a desaparecer ni el mal, dejar de avanzar. Tendrá un final agridulce, y eso es lo diferente; y lo q más me gusta.
Sí, ya sabes…esa es tu opinión tío. La cual es muy respetable, y sinceramente, si hay muchos que lo opinan también lo desconozco y me es inverosímil. Gracias por tu comentario.
Estoy en total desacuerdo contigo, creo que es la peor pelicula del año, con la lluvia de hamburguesas II..
del 1 al 100 quedaria en un 60.
Y NO SOLO YO OPINO ESO, SINO CIENTOS DE COMENTARIOS EN TODO EL MUNDO OPINAN LO MISMO.