Puntuación
Un thriller de espías tan vistoso y entretenido como superficial y olvidable.
El director británico Guy Ritchie tiene un estilo definido que le convertiría en una suerte de autor del cine comercial. Nacido como realizador como una respuesta a las cintas de Tarantino en versión inglesa, sus películas se han caracterizado por sus escena de acción espectaculares, la presencia de tipos duros, sus diálogos humorísticos con algo de la flema característica del país que le vio nacer y la utilización de numerosas canciones pop en sus bandas sonoras. En la mayoría de las ocasiones, el resultado es un producto tan vistoso como vacío.
Un ejemplo de ello es Operación Fortune: El gran engaño, un intento por volver a las películas de agentes secretos que ya abordara en la muy fallida Operación U.N.C.L.E., versión cinematográfica de una serie de televisión de los años sesenta El agente de CIPOL. Ritchie cuenta para ello con dos de sus actores fetiche: Jason Statham, antiguo atleta que se convirtió en estrella del séptimo arte gracias a la películas del director, y Hugh Grant, reconocido intérprete británico que parece sintonizar con el particular sentido de humor del realizador.
El primero encarna a un agente del MI6 que encabeza un grupo de agentes que se encargará de recuperar una peligrosa arma robada al gobierno británico y que tendrá que arrebatársela a un mafioso, al que da vida el segundo, obsesionado con una estrella de Hollywood, al que interpreta el siempre inexpresivo Josh Harnett.
Ritchie se encarga de coreografiar con cierto estilo las escenas de acción, salpicar de chascarrillos marca de la casa los diálogos e introducir los habituales giros con los que sorprender al espectador menos precavido. Todo ello con la habitual presencia de temas pop en la banda sonora que dan el toque cool y comercial al producto.
El resultado es un thriller simpático y superficial que se disfruta sin esfuerzo y se olvida a la primera de cambio. Cabe destacar en este nuevo ejemplo de la fórmula Ritchie la presencia de una estupenda Aubrey Plaza, como la inteligente miembro femenina del equipo encabezado por el impertérrito personaje de Statham. Ella es la verdadera robaplanos de este filme tan inofensivo como entretenido.